La semana después de Pascua, Sant Jordi se convierte en una auténtica fuente de cultura, ya que lleva a cabo una intensa programación cultural.
Actuaciones de diversa índole para todas las franjas de edad se desarrollan en el municipio: deportivas, lúdicas, musicales y literarias, entre otras.
Una semana intensa, a través de la que se hace hermandad y pueblo.